martes, 10 de julio de 2007

LIBRERÍAS DE VIEJO Y CINE ACTUAL

Librerías de viejo


Son las únicas que quedan. Lo demás no puede llamarse librería según se entendía hace algunos años; no podemos decir que lo sean esos comercios en donde venden palabras enlatadas en serie, encargadas, repetidas hasta la saciedad, y en donde los títulos tienen fecha de caducidad, como los yogures. (Naturalmente, las excpeciones confirman la regla, y si no véase "Pròleg", entre otras, en donde saben muy bien lo que es resistir y persistir).


He tenido que ir a Canuda, cómo no, para encontrar un libro cuya dedicatoria es ya todo un acontecimiento. Dice así: "A Dios, que me es muy simpático". Y comienza: "Quiero empezar por dejar dicho, antes de pasar adelante, que la idea, el tema y numerosos incidentes y frases de "La tournée de Dios, cuarta novela que doy a la imprenta para justificación de mi presencia en el Mundo, no se me han ocurrido ahora, en el día de la fecha. (...) Ideé y planeé este libro -en fin- ante el espectáculo misterioso y eterno de la Naturaleza, agobiado de estrellas, sitiado por inmensos bosques de pinos, junto a una hoguera perfumada de resina, con una barba de veinte días y pelando patatas".


"La tournée de Dios", de Jardiel Poncela, no se reedita, a pesar de estar agotadas las existencias desde hace años. Hay una edición disponible, sí, pero facsímil, y cuesta setenta y cinco euros.
Y no parece que sea porque el hombre fuese franquista -¿cómo pudo serlo, y además recalcitrante? Qué poco se parecen a veces los hombres a sus obras, cuándo éstas pertenecen al mundo del arte. Y provocan esas contradicciones: ¿Lo leo o no lo leo? Voy a leerlo. Y luego os cuento.

Cine actual

Me pregunto, por ejemplo, si no será esta profunda oleada de incultura o anticultura analfabetizante la que está consiguiendo que, por ejemplo en el cine, antes de la película, aparezcan una especie de consejos interpretados por los Simpson en los que se recuerda que no se debe fumar en la sala o, y esto es lo increíble, hablar. La gente piensa que está en el salón de su casa u olvida que el cine además de verse se escucha o sencillamente nada, no piensa, sólo hace lo que le pasa por el frontal -nunca más adentro- y santas pascuas. Y ya se ve una haciendo aquello de chssssss y pensando: al cine no vuelvo, es que no vuelvo. Y no vuelve. Yo llevaba un año y medio sin ir a ninguna sala comercial. El lunes recordé por qué.

8 comentarios:

Ripley dijo...

¡ Qué razón tienes! Yo siempre prcoucro ir a una librería "pequeña", de esas regentadas por libreros de toda la vida que saben lo que les pides y te ayudan, sitios donde puedes sumergirte entre libros y escoger. Sobre las librerías de viejo, hay una en especial en Bilbao, cerca de los dos museos, donde poder encontrar libros como el que tú describes, un placer. ¿ El cine? ufff, ya no hay películas como las de antes, ni la gente va al cine a ver la película, sólo a pasar el rato y atiborrarse de "cris, cras" crujientes chucherias.un saludo

Flavia Company dijo...

Ripley:
Apunto en mi entrada de hoy una película digna de ser vista y comentada. Si la ves, ya me dirás.

Joana dijo...

Ripley;
por favor pásame el nombre y dirección de esa librería de Bilbao, que estas vacaciones voy a estar por esas tierras y me daré ese placer que recomiendas (entre otros!).
Gracias.

Ripley dijo...

JOANA: sinceramente, no se el nombre, llevo años pasando por allí y no lo se pero te dejo mi mail, apúntalo y yo te la consigo además de ayudarte con sitios adonde ir, etc si vienes a mi ciudad. Flavia, disculpa que usemos tu espacio para esto. (ripley506@gmail.com)

dable dijo...

Creo que hemos entrado en la sociedad de la deseducación (para algunas cosas). Si de la involución sacáramos algo...

Flavia Company dijo...

Dable:
No creo que el cerebro humano, visto lo visto, esté preparado para sacar algo de la involución. Peras al olmo.

Marco Antonio Yglesias dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Marco Antonio Yglesias dijo...

¿Qué pasa? ¿Que por ser franquistas ya ha de suponerse que son malos escritores y malas personas? O sea, que Jardiel Poncela -según usted- es buen escritor A PESAR DE SER FRANQUISTA. Me parece, sinceramente, una visión muy pobre y maniquea del mundo literario. Es más, yo le diría que normalmente sucede lo contrario: hay muy malos escritores que hoy en día pasan por buenos justamente POR HABER SIDO ANTIFRANQUISTAS. Y muy buenos escritores (César González-Ruano, Rafael Sánchez Mazas, Rafael García Serrano, Agustín de Foxá, etc.) que llevan años de injusto olvido o desprecio PRECISAMENTE POR HABER SIDO FRANQUISTAS O FALANGISTAS. Así vamos...

Ah, y otra cosa sobre un bonito epíteto tan de su gusto: parece "recalcitrante" va unido según usted a "franquista". Pero dígame, ¿todo franquista es "recalcitrante" o hay franquistas no "recalcitrantes"? ¿Pueden existir "recalcitrantes" no franquistas? Mire usted que, según mi opinión, lo que predomina en estos tiepoes es el tipo "intransigente recalcitrante", o sea una persona roída por los el tópico y un pobre y limitado esquema mental sobre historia y literatura. Yo a éste le llamaría "progre recalcitrante".

Aquñi dejo mis artículos más recientes aparecidos en La Vanguardia. Espero que los disfruten. :-)